Bienvenidos al sitio donde con toda humildad publico las canciones que mi Daena me dicta. Me susurra despacito cada palabra a ese oído que no es el físico, sino que está mucho más allá de mi entendimiento humano. Porque lo esencial, como diría el Principito, es invisible a los ojos...



martes, 30 de julio de 2013

ALMAS



Las almas miserables sostienen que el mundo les debe algo.
Que ellos no merecen lo que les tocó en suerte y que a aquellos que los juzgan les corresponde ser condenados.

Las almas tristes sostienen que el sol no sale para ellos,
que los pájaros no cantan sino chillan y
que las mariposas nacen sólo para morir.

Las almas enojadas ven la noche como un manto oscuro de miedos.
Al día como un azul dañino a la vista.
A los niños como llanto y narices sucias.
A los gatos como egoístas y perezosos.

Las almas altivas piensan que el oro es más refulgente que el sol.
Que las piedras sólo sirven si son preciosas.
Que los árboles se plantan para hacerles sombra a sus hijos
y el agua es mineral embotellado.

Las almas endemoniadas matan con palabras y hachas.
Seducen niñas con faldas blancas y luego las abandonan entre sangre y llanto.
Ríen con risa de diablo y tienen miradas de incendio.

Las almas simples juegan con un pájaro y un nido.
Corren descalzos y se desnudan en los ríos
y alzan su vista en las noches estrelladas y sueñan que nadan en el infinito.

Las almas puras no se enojan, no se sienten felices sin sentido, no se enorgullecen ni se ponen tristes.
Tampoco corren para alcanzar algo ni se sientan a criticar a otros...
Sólo observan... y se reconocen...

PAOLA

jueves, 25 de julio de 2013

RECORTES



¿Acaso no adviertes la luna recostada en la montaña?
Ella no supone nada de la sierra, solamente alumbra sobre ella.
No se fija si los lobos le aúllan, o si los pájaros se esconden en sus nidos.
Tampoco suspira por encontrar algún perdido rayo de sol en la penumbra
ni se inquieta por vampiros secos o por cuervos bruñidos de mentira y soledad.

Ella ni siquiera se asoma hacia la Tierra.
No nos guiña un ojo, ni espera gustarnos.

No anda reclamando vidalas de los tiempos niños, ni sacrificios de los ancianos padres.

No sabe siquiera que su luz no es tan suya. Y que al Rey le pertenece.

No se percata de las miles de estrellas que a su alrededor fulguran.
Ni mira su cuerpo árido, sus ríos secos, su esencia de planeta extinguido...

No sabe que desde aquí abajo le dibujamos ojos
o que algunos hombres la pisaron hace años y plantaron su bandera y aplaudimos en cadena.

No ve la vida recortada de los hombres.
No entiende de dobleces, ni dualidades, ni fragmentos.
No cree que ella sea única. Ni que es buena. O el demonio.
No sabe que la endiosan, o la odian, o la estudian.

Sólo Es. Sin los imbéciles retazos humanos…
Y se abandona al eterno rodar del Universo…

Paola



jueves, 4 de julio de 2013

YO NO MORI


No te acerques a mi tumba sollozando.
No estoy allí. No duermo ahí. 
Soy como mil vientos soplando.
Soy como un diamante en la nieve, brillando
Soy la luz del sol sobre el grano dorado
Soy la lluvia gentil del otoño esperado 
Cuando despiertas en la tranquila mañana,
Soy la bandada de pájaros que trina
Soy también las estrellas que titilan,
mientras cae la noche en tu ventana 
Por eso, no te acerques a mi tumba sollozando
No estoy allí. Yo no morí.
(Plegaria aborigen)